MI VIDA DE AMARILLO 13.
La noche en el hospital no es lo mismo que el día. Seguramente parecerá una obviedad, pero lo cierto es que vivir la noche del hospital en estas circunstancias tan excepcionales, aún te abre más en canal.
Algunos pacientes duermen, otros no… algunos son presas de sus pesadillas y las viven como si fueran realidad, y al atenderlos y tratar de comunicarse con ellos, te produce terror… La mierda incrustada en sus uñas, dispersa por las barandillas de la cama, impregnada en las fotos de sus seres queridos, fuera de sus cajones, arrancadas de las paredes, y todo justificado con frases inconexas y enajenadas es un escenario que produce escalofríos… la fiebre, el horror y la mierda por todas partes… Una inyección no calma el dolor.
Hay sanitarios que conversan en voz alta sobre naderías. Algunos se sienten especiales y sentencian sobre cualquier asunto… Hay otros que intentan aprovechar unos momentos de tranquilidad para descansar un rato, y piden a los que vociferan que bajen el volumen, pero los que parecen sufrir de verborrea nocturna miran a los otros con cara de superioridad…
Contemplar la rabia de una enfermera contra una bomba dosificadora que ya no sirve para nada, porque el paciente al que estaba aplicada acaba de morir y encontrar olvidado un dibujo infantil con un “Te quiero, abuela”, que obliga a la trabajadora sanitaria a reabrir el sudario que acababa de precintar para que se lo lleve con ella Luisa, son gestos que rompen un poquito la noche de terror en el hospital y le devuelven un matiz de color y calor humano.
No quiero repetir la experiencia de la noche pasada. Alguien comentó con aire de broma, como para suavizar la situación: -¡Esto no está pagado!- Todos trabajamos con la intención de ser retribuidos económicamente; pero creo que no todo se puede compensar con dinero… A veces siento que algunos trabajos que hago llevan su compensación en sí mismos, y otras veces siento que vendo mi tiempo y mi cuerpo y mi alma por cuatro duros mal contados… y eso me hace avergonzarme de mí mismo.
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